8.4.15

Fortuito

"El hombre que desconoce esa emoción, que es incapaz de maravillarse y sentir el encanto y el asombro, está prácticamente muerto." - Albert Einstein.




Los trazos convergen en este punto.  No sé si fue casualidad o causalidad, pero desde entonces la avenencia con la calma, con lo lineal, me es imposible.  Ahora disfruto de la fascinación continua, del asombro constante, pues encontré algo que ni siquiera buscaba.  Fortuito, como los mejores encuentros han de ser.  Me quedo absorto ante tu encanto, una y otra vez, como si descubriese algo nuevo en cada gesto, en cada mirada, en cada beso... Y me dejo maravillar ante tu belleza y tu locura.  Y nada más importa. 

...No dejes de sorprenderme nunca.


3.2.15

Beodo de ti


En La Imágen... Charles Bukowski en "Apostrophes" 1978

Suele ser confuso... Sin embargo lo disfruto.  

Como sin verte te observo...  
Como sin estar te siento... 
Como percibo tus cambios, 
tu interés o indiferencia...  
Describirlo, no sé.. 
Beodo de ti, tal vez.  
Sólo sé que sin darte cuenta me haces alcanzar el éxtasis.


Única


Imagen de Jorge Aguirre Amorena



Amistades, No Muchas Realmente... La Tuya Indispensable, Extraña, Sin Frecuencia Como La Describe Borges, Imprescindible; Tal Como Tú.

14.1.14

Elogio IV

Apareciste un día, me atraías.  Simple.  Quise conocer un poco más, había algo en ti que me inquietaba, mucho más allá de la fascinación que me producía ver tus ojos, sí, esos ojos que sonríen... Mucho más allá de tus labios que se movían con la mayor afinación que hubiese visto nunca, que me seducían y me invitaban a estar cada vez más cerca.

Era tal vez, tu forma tan voluble de entender la vida, ese vaivén de tus ideas.  Así, poco a poco entendí, que lo que más me encaminaba a ti era tu caos.  La tempestuosa calma que arrullas, el apacible agobio que llevas contigo.

Y voluntariamente,
caminé hacia el huracán,
mil vueltas alrededor, 
conociendo y reconociendo, 
eufórico y molesto, 
aturdido y jactancioso...
Hasta que de pronto,
entré al ciclón,
justo en medio del tornado
Y hallé en ti
una armonía perenne.



30.8.13

Elogio III


Allí estaba yo, con la vida más gastada, con los ojos más mohínos, la mente aletargada, con ganas de nada… Tal y como no quería estar, justo donde no quería estar… Pero allí estaba yo, sin esperar nada.  Al menos era de noche, se disfruta más o se sufre menos, siempre es mejor que sea de noche.  Sentía que la estaba malgastando, cosa sin importancia, muchas más pendientes, muchas previamente malgastadas.

Súbitamente la situación se dio la vuelta.  Un cruce de miradas tímidas, un saludo ridículo, un aliciente para sonreír, un beso, un comienzo... esta vez un comienzo.  Y cómo ya habíamos hecho antes, nos arrancamos mutuamente de los parámetros de la naturalidad.

De repente encontraba mil excusas para ver de nuevo esos ojos que saben sonreír y hacer sonreír.  Deseo de perdurar, de conocerle y reconocerle.  Pasión.  Se convirtió de pronto en el camino que quería recorrer.


Empecé a quererle, era normal, lo inusual era la fascinación desmesurada que sentía cada vez que la veía, como si la descubriera nuevamente, como si se reinventara para mí y me atrapara aún más cada vez.

Persiste...

17.2.12

Tiempo de Incultura.

Vacío, nimio; es lo que hay, pero vacío parece ser para muchos más que suficiente en estos días donde la desidia maneja los hilos de tantos títeres que, como niños, aún se entretienen con trivialidades, mientras les es cercenado todo aquello que en algún momento fuese avidez de conocimiento. Y la erudición, que debería tener un papel preponderante en la sociedad actual, cada vez se ve más rezagada. La docta, que debiese ser objeto de fascinación y mantenerse en constante crecimiento, está siendo progresivamente aislada del pueblo y se ha convertido en un grupo muy exiguo. ¿Dónde se quedó la voracidad intelectual común?

27.10.11

Cree, Crea.



Hoy los ojos están marchitos...
Las manos están rotas...
El vacío se apodera...


Pero estos ojos han estado marchitos antes...
Estas manos han estado rotas antes...
El vacío va y viene...

Estas manos y estos ojos no se rinden,
luchan, se rehacen, se levantan,
más rápido tras cada caída...

Y saben sonreir, 
porque aprendieron a dejar atrás,
a deslizarse sobre lo superfluo,
a permitirse poner la realidad en su dimensión.

Estos ojos y estas manos disfrutan de caer,
porque entienden ya que las heridas sanan,
y conocen ya,
el placer del resurgimiento.

Hoy los ojos están marchitos y las manos están rotas...
Pero están alegres,
porque comprenden lo que sucede después...
para ellos, no será la primera vez.

Y vos, que compartes estos ojos y estas manos,
deléitate también, creciendo nuevamente.

8.8.11

Ella, única.

Es diferente, aunque para muchos parezca un día normal, hoy se celebra la fortaleza, la valentía, hoy se te celebra; renace el espíritu incansable. Hoy puedo recordar cada momento compartido, aunque se que faltan muchos por compartir todavía.

Nunca había imaginado un 8 de Agosto tan lejos de ti, sinceramente no quiero que hayan muchos más de éstos y estoy seguro que no soy el único que así lo desea.  Quiero decir gracias por todo lo que me has enseñado, a pensar más allá, gracias por cada segundo de tu tiempo, por hacernos crecer, por estar siempre disponible, por confiar en nosotros, por crear unidad.  Se que hay dos personas que sienten esto, y aunque quizás ellos no lo digan de la misma manera, se que también se dan cuenta de todo lo que haces y lo que eres y seguramente están tan agradecidos y orgullosos como yo.

Ma, muy feliz cumpleaños.

24.5.11

Elogio II


Incólume, como siempre,
la historia de quienes se unen,
de quienes renacen cada vez.

Hoy parece medrar aún más,
celebra tus gestos, tu mirada,
tus ideas siempre volando;
te celebra.

El tiempo como tal desaparece,
pero permanece el instante.

Y nada más importa,
solamente el instante,
el instante en tu presencia.

Percibirte, en tu esplendor,
en la sublimidad desprendida,
de tus actos más naturales,
que provocan a Venus,
desear no haber nacido nunca
de la mano de Botticelli.

Solo queda cubrirte,
y permanecer en ti
para seguir depurando,
la historia sin tiempo.